lunes, 13 de mayo de 2013

Sus libros 2/2


Mapa con el curso del río Arno

Dejo sus libros y me asomo a los propios escritos del dueño de tan dispares gustos literarios. Parecen borradores, llenos de letras ribeteando los dibujos en una mezcla, a veces caótica, que acomoda asuntos totalmente distintos en una misma hoja. Observaciones sobre todo tipo de temas, desde la munitoria, al estudio de las olas; desde el mecanismo de un reloj a la elaboración de un faraónico proyecto de navegabilidad del Arno para dar salida al mar a Florencia. Desde cómo volar, a cómo practicar túneles bajo tierra. No hay barrera al talento de este hombre. No lo conozco pero seguro que es un constructor, un hacedor que opone a la naturaleza el ingenio humano. Y su herramienta principal, con la que piensa, con la que aplica el intelecto a lo que hace, es su dibujo. Cavila, no en forma discursiva, sino gráfica, como si fuera un pintor. Pero, claro, no puede ser un pintor. Si lo fuera, además de ingeniero, relojero, matemático, filósofo..., ya es que sería un genio.

Finalmente y lo que me lleva a rechazar a este hombre—, encuentro unos textos abominables, escritos por él, en donde, en ciertos asuntos, antepone la experimentación al crédito debido a nuestros antepasados. Cómo se atreve, desde su vileza de ser humano, a atentar contra el principio de autoridad. Qué sabrá él de nada, mortal como es. ¡Bah!

Nada fructífero puede resultar de una mente que no reconoce límites. ¿Dónde iría a parar la humana condición si sus individuos creyeran que puede hacerse cualquier pregunta? En fin, espero que, en el futuro, todavía queden correligionarios míos con la clarividencia necesaria para encauzar las cosas convenientemente.
 
Fuente: exposición y catálogo de El imaginario de Leonardo. Códices Madrid de la BNE

4 comentarios:

  1. ¡Qué bueno! Es Da Vinci. Lo pensé pero no me atreví. Buen enlace ese a esa puerta abierta que era la mente de ese genio. Genial ese texo que contrapone la visión del hombre, de la sociedad que rodeas y convive con el genio y finalmente lo rechaza.
    Qué belleza ese dibujo del río Arno, qué sutileza de colores. Bien podría ser un cuadro moderno, medio figurativo, medio abstracto.
    Saludos.

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    1. Qué interés el de Leonardo, qué entusiasmo. Sus anotaciones mezcladas unas con otras, tal vez puedan conducir a pensar que no había un sistema, un proyecto definido. Pero era un hombre de su tiempo, el tiempo en que se creía que podíamos aún abarcar el conocimiento.

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  2. Respuestas
    1. Es verdad, cómo hieren mortalmente estos genios al tiempo, que se queda sin fuerzas para impedir que sigan presentes entre nosotros.

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